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martes, 4 de abril de 2023

PETER SELLERS O CÓMO NO GANAR AMIGOS

 



Peter Sellers se inició en el vodevil siendo apenas un niño, cuando acompañaba a sus padres recorriendo toda Inglaterra de pueblo en pueblo con un espectáculo portátil, medio teatro, medio circo, en el que lo mismo hacían uno de aquellos musicales añejos de Gilbert y Sullivan, que serraban un cajón con señorita dentro. Su primera especialidad cómica fueron las voces. En esos años dorados de la radio, el joven Peter era capaz de contar chistes con todos los acentos del Imperio Británico, o de imitar a cualquier personaje célebre. Convertido en una rutilante estrella radiofónica, ganó suficiente pasta para retirar a sus padres de la agitada vida de la farándula y para convertirse en un hombre rico. Al decir de muchos, en uno de esos snobs inaguantables.

Las gentes del cine no tardaron en fijarse en él. Peter Sellers fue durante los años cincuenta y sesenta, la cara más visible de lo que se dio en llamar el humor inglés, que probablemente antes de él era desconocido en todo el mundo. En sus primeros trabajos delante de las cámaras supo moderar su vena histriónica, y nos dejó interpretaciones memorables como la de El quinteto de la muerte, junto a Alec Guinnes, otro gigante de la comedia. Luego llegó su colaboración con Blake Edwards en la serie de La pantera rosa y en El guateque, donde alcanzó la cima de la comicidad. Stanley Kubrick se fijó en él y le llamó para protagonizar ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú, acaso la película más atípica del genial director. También se fijaron en él varias mujeres hermosas, entre otras Britt Ekland que fue una de sus esposas. Todas ellas efímeras, claro, porque digámoslo de una vez, Peter Sellers en las distancias cortas debía ser insoportable. Maniático y supersticioso hasta el límite, Sellers al parecer nunca leyó el célebre manual de Cómo ganar amigos. Y si lo leyó, le aprovechó muy poco. Se cosecha lo que se siembra, y su pésimo carácter le aseguró la más completa soledad al final de su vida. En fin, como a menudo sucede con los actores y con los artistas en general, más vale olvidarse de la persona y recordar al personaje, un cómico colosal. Os dejamos una selección de escenas de La pantera rosa (1964). Clic en el enlace y buen provecho.

https://www.youtube.com/watch?v=Xza6k8X_RRg

Próxima entrega: Charlton Heston


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