Este
ilustrador inglés nacido en 1912 está considerado en el mundo del cómic como el
máximo exponente de la escuela realista británica, que tendría tan ilustres
continuadores. Nada más terminar la escuela elemental, comenzó a trabajar en el
estudio de dibujo de su tío, y allí se especializó en la ilustración erótica
para las revistas a color que comenzaron a publicarse en los años treinta.
También destacó en ese tiempo como ilustrador de figurines para revistas femeninas
de moda. Wright dibujaba del natural a las modelos que contrataban las
revistas, y en ese tiempo conoció a Esme, que se convirtió en su esposa y en su
modelo favorita. Para la revista The Sketch comenzó a dibujar en 1941, y poco
después para Men Only, una publicación para adultos. Desde entonces y sobre
todo durante la guerra, fue el más popular ilustrador británico de pin-ups,
chicas glamurosas y estratégicamente desvestidas, que contribuyeron a elevar la moral de la tropa, eufemismo que
omite otras elevaciones más prosaicas.
David Wright se estrenó como autor de
cómic a partir de 1956, con la que fue su única y más popular serie: Carol Day, una heroína de aventuras a
medio camino entre el romanticismo y la novela negra. Con guiones magníficos y
unas viñetas en blanco y negro de inspiración cinematográfica, pero sin olvidar
el elegante matiz erótico que siempre cultivó su autor, Carol Day se convirtió
en una de las series más populares y leídas en el Reino Unido y en América.
Wright falleció en 1967. Os dejamos aquí algunas muestras de su espléndida
plumilla. 















 
No hay comentarios:
Publicar un comentario