viernes, 19 de abril de 2024

LUCAS FERNÁNDEZ Y LOS INICIOS DEL TEATRO ESPAÑOL

 


Lucas Fernández nació en 1474 en Salamanca o quizá en la cercana localidad de Cantalapiedra. Muy poco se conoce acerca de su origen, salvo el nombre de sus padres, Alonso y María. Se sabe que muy joven entró en el servicio de la catedral salmantina, donde coincidió con su coetáneo Juan del Encina, a quien dedicamos un reciente artículo. Ambos fueron músicos y cantores de coro, y Encina, en su Égloga de las grandes lluvias, alude a Lucas Fernández como maestro de coro, cargo al que al parecer, él mismo aspiraba. En cualquier caso, si existió entre ellos alguna rivalidad, no se sustanció en querellas, sino muy al contrario, pues ambos se prodigaron mutuos comentarios elogiosos. De hecho, en el plano literario, cabe calificar a Fernández como encinista o seguidor de Juan del Encina.



Estamos en los albores del Renacimiento literario español, que sigue en buena medida las formas poéticas y dramáticas importadas de Italia. Las piezas teatrales, tanto autos sacramentales como farsas y églogas de ambiente profano, aún no han ingresado en ese tiempo en los corrales de comedia. Se representa en las plazas públicas, junto al atrio de las iglesias, en improvisados tablados.

En cuanto a la obra de Lucas Fernández, aunque probablemente debieron existir ediciones anteriores hoy perdidas, hasta nosotros ha llegado la impresa en Salamanca en 1514 por Lorenzo de Liondedei, que bajo el título de Siete Farsas y Églogas al modo pastoril, contiene tres piezas religiosas, una comedia, dos farsas o cuasi comedias, y un dialogo para cantar que probablemente constituye el más remoto antecedente del género musical español que más tarde se denominó zarzuela. Sin abandonar el estilo encinesco, Fernández alarga los versos e introduce mayor número de personajes. En las farsas profanas el amor es el tema fundamental. Aparece en ellas una clara diferencia entre los personajes nobles, damas y caballeros, y los villanos, pastores o mozas aldeanas, que se expresan en dialecto sayagués.



En las piezas religiosas, dos églogas de Navidad y un auto de la Pasión, destaca un lirismo expresivo y premonitorio del gran teatro en lengua castellana de las décadas siguientes. Lucas Fernández es junto a Juan del Encina y Gil Vicente, el precursor de los autos sacramentales, las comedias y los entremeses que triunfarían en las tablas durante el Barroco y los siglos de Oro del teatro español. Nuestro Bigotini literario os brinda el enlace con las Farsas y Églogas de este pionero de la dramaturgia en castellano. Disfrutad la sencillez de su métrica, Renacimiento puro al alcance de un clic:

 

https://www.dropbox.com/home/Profesor%20Bigotini?preview=Farsas+y+%C3%A9glogas+al+modo+y+estilo+pastoril+y+castellano.pdf

Requebrar y esperezar

todo debe de ser uno,

y de consuno

bostezar y suspirar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario